En 1996, cuando aún nos sacudíamos de los slogans inventados para disfrazar democráticamente esta nación aún herida con los grilletes de 17 años de terror y olvido, nacimos como una vía de escape , como un escenario nuevo que debía terminar con la dictadura cultural de las butacas apernadas en los teatros monopolizados por un puñado de personas que decidían quien merecía cultura y quién no.
Y ese impulso guerrero , de cortar con los grilletes establecidos, nos llevó a las calles, a soñar, a vestir a nuestras ciudades y plazas de fiesta, a volver a reencantarnos con el contacto de la gente que habita los lugares públicos, que camina los barrios, que pinta los muros, y llevarles a ellos de vuelta la cultura, la memoria y la identidad que les fue robada sin previo aviso.
Así, juntos , nos fuimos enriqueciendo cada vez más, creciendo con este Chile gigante que no se guarda en bibliotecas, subterráneos y afiches publicitarios, sino que se ilumina con la fuerza de todo un pueblo que quiere ver frente a sus ojos el reflejo de lo que le contaron sus abuelos, padres y hermanos, la verdadera cultura nacional, en esa que no te venden en los libros de historia ni en los cancioneros del kioskos de la esquina.
Ya son 20 años dando la pelea, y sin Ustedes esta justa hubiera quedado truncada al primer intento; pasamos de la locura punkie de "A Sangre e´Pato", montaje que nos dio la razón de que debíamos seguir haciendo teatro junto a la gente, así, le aportamos memoria y identidad con hechos históricos que viven en las mazmorras de nuestra educación; El Nacimiento de Chile como nación independiente gracias a sus verdaderos héroes como Manuel Rodríguez en el "Húsar de la muerte"; Las matanzas indiscriminadas en el inicio del siglo 20, hecha por unos pocos contra sus propios compatriotas en "1907, el año de la flor negra"; La falta de respeto por nuestra identidad ancestral en "El Extranjero, El último Hain" y una serie de obras donde dimos cuenta de cómo la historia se vuelve a repetir una y otra vez si nos seguimos negando a que verdaderamente ocurrieron.
Así con la banda de música de la compañía como soundtrack de nuestras obras y de nuestras fiestas, nacieron también "Frickchou", "Karrocerías", "Los Caminos de Don Floridor" y viaje al centro de la tierra", estás dos últimas dedicadas al espíritu de la imaginación única e irrepetible del mundo infantil.
Así nos hemos construido y reinventado cientos de veces, con un Neruda que hicimos volar, con nuestra música sacada de las bases de nuestra cultura para llevarlas a países tan disímiles como Argentina, Colombia, México, España, Francia y la India, entre otras muchas paradas donde recibieron este clamor popular que hoy cumple 20 años: El Colectivo Artístico La Patogallina, un teatro de sueños que se hizo realidad gracias a todos ustedes….. y sólo a todos ustedes.
Por eso te invitamos a que nos acompañes en esta fiesta popular que este año explotará una vez más, porque dicen que 20 años no son nada, pero para el que quiere olvidarlos.